Adiós a mi vivienda de protección oficial

Ya lo veníamos anunciando, queremos escuchar la voz de todos… Y más si eso sirve para que llegue más alto. Por eso, hoy toma la palabra una joven villalbina que se convirtió oficialmente en vecina ahora hace 9 años, gracias a la “suerte” que le abrió las puertas de una vivienda de protección oficial, que pronto pasó de ser un sueño a una pesadilla, debido a la entrada en juego de una empresa privada que decidió cambiar las reglas…

En primer lugar quiero agradecer a QuienesQuienenVillalba que me haya dado la oportunidad de contar lo que nos ha ocurrido a 44 propietarios adjudicatarios de las viviendas de los Valles de VPO. Lo cierto es que hay muchos Villalbinos que aún no saben nada, después de tanto tiempo, a pesar de haberse informado en diferentes medios de prensa, televisión y radio; por eso en este artículo cuento en primera persona lo que hemos vivido por la venta de las viviendas de renta protegida a inversores de capital privado.

El problema comenzó el pasado 13/09/2013, una fecha muy señalada para varios vecinos y adjudicatarios de Villalba, ya que recibimos un email de los administradores de las viviendas de protección oficial (VPO) -construidas con dinero público y en suelo público en C/ Rincón de las Eras- con la noticia de que el 29 de agosto de 2013 Azora recibió notificación por parte del IVIMA de que le habían adjudicado 32 promociones de la Comunidad de Madrid, entre ellas las correspondientes a Rincón de las Eras, 12, 14, 16 y 18.

En dicho email nos comunicaron que estaba previsto que el 11 de octubre de 2013 se firmara la entrega definitiva por parte del IVIMA. “Desde dicha fecha Azora (Encasa Cibeles) será la propietaria de vuestros edificios. Azora está reuniéndose estos días con los distintos administradores de las promociones para obtener, de primera mano, una información completa de todas ellas. Nuestros intentos para conseguir que las juntas de gobierno de ambas comunidades pudieran estar presentes fueron rechazados.”

Tras este primer impacto, que produjo una razonable impresión negativa de forma generalizada, Azora (Encasa Cibeles) se puso en contacto con nosotros a través de una carta que informaba de dicho cambio, señalando que nuestros contratos vigentes con el IVIMA se mantendrían con las mismas condiciones. También nos informaron de que, una vez pasado el periodo de siete años, nos ofrecerían la venta de “nuestras” viviendas, como fue acordado con el IVIMA, y que tenían la intención de poner a la venta las viviendas actualmente desocupadas

En aquel momento, no teníamos claro si lo que estaba ocurriendo nos beneficiaría o todo lo contrario, queríamos pensar bien y ser positivos aunque tuviéramos muchas dudas e incertidumbres. Lo cierto es que sabíamos lo complicado que era tratar con el IVIMA, y al fin y al cabo el objetivo de esta empresa evidentemente era la rentabilidad económica… Por eso suponíamos que, si querían vender viviendas las comunidades, se esforzarían por evitar problemas sociales y mantener las infraestructuras con un aspecto impecable.

Así que con esa información y los buenos pensamientos la impresión particular fue positiva, durante poco tiempo… Ya que pronto comenzaron a llegar noticias de que, aquellos vecinos que no compraran la vivienda al precio establecido por la nueva empresa, deberían abandonarla.

Transcurrido un tiempo, a primeros de año nuestros vecinos de la Comunidad de Madrid se empezaron a movilizar, empezaron a convocar asambleas y se creó una Plataforma de afectados por Vivienda Pública y Social de Madrid.

Aquí en Villalba tenemos el apoyo de La Plataforma de Afectados por la Hipoteca, de diferentes grupos políticos de la oposición y en su día el gobierno de nuestro pueblo. Durante un periodo nos estuvimos reuniendo, e incluso contamos con abogados de los mismos.

Desde el Ayuntamiento nos aseguraron que llevaban semanas negociando con la empresa Encasa Cibeles para conseguir una prórroga que nos permitiría permanecer en las mismas hasta marzo de 2016. Para nosotros no era suficiente, queríamos permanecer en nuestras viviendas en las condiciones pactadas desde el minuto 1, lo que estábamos viviendo era una injusticia.

En el edificio estuvimos sin limpieza contratada, nos turnábamos para mantener el edificio limpio. Los vecinos se empezaban a ir, con lo que la cuenta corriente de la comunidad se quedaba en números negativos. La empresa adjudicataria se puso manos a la obra el año pasado, pintaron e hicieron algunos arreglos para posteriormente empezar a enseñarlos para venderlos.

Comentar que sí nos llegó la oferta de compra…un precio desorbitadísimo que queda totalmente fuera del alcance de mis posibilidades, y eso que nos hicieron la quita de la mitad de lo que ya habíamos pagado. Para más inri, hace poco ya han vendido y alquilado las viviendas, la sorpresa ha sido el precio, mucho pero que mucho más barato de lo que nos ofrecieron y con el descuento hecho, increíble.

Otro de los temas importantes ha sido el cobro del IBI… cuando el IVIMA nunca nos lo había cobrado, teniendo en cuenta que lo que tenemos es un contrato de alquiler.

Lo cierto es que nosotros, al fin y al cabo, hemos tenido más suerte que otras promociones de la Comunidad de Madrid, aunque aquí también hemos visto cómo a vecinos les quitaban sus ayudas dejándoles abandonados con sus situaciones económicas.

El año pasado fue el primer desahucio, el cual fue muy desagradable. Mi vecina solo tenía que entregar las llaves al funcionario, se presentaron demasiados Guardias Civiles para una sola persona, nos acordonaron el portal y para entrar a nuestras casas teníamos que facilitarles el DNI.
Aún con todo lo vivido, lo más duro para mí ha sido ver irse uno a uno a mis vecinos renunciando a su derecho, a su vivienda que le había tocado mediante un sorteo público.

Todos se han ido, todos menos una vecina luchadora y yo, que hemos pasado casi un año solas en el edificio. Pusieron la llamada puerta de seguridad “anti-patada o anti-okupa” para evitar que los pisos vacíos fueran ocupados, también nos pusieron seguridad y aun así algún piso se ocupó, en nuestro bloque fue por una familia con niños.

No tengo palabras para describiros correctamente cómo nos hemos sentido y nos sentimos: en mayo de hace ya casi 9 años nos tocó el gordo y la que pensábamos que iba a ser nuestra casa, está siendo una pesadilla. A día de hoy no sé hasta cuando estaré en esta casa, la que iba a ser mi casa, ya que no nos han modificado el contrato y no se quieren reunir conmigo, si dentro de unos días no se me comunica nada, se supone que se prorroga el contrato de alquiler un año más.

Por último indicar que El Partido Socialista de Madrid (PSM) ha llevado a los tribunales estas adjudicaciones, por considerar que ha habido un quebranto patrimonial en la operación de venta a esa firma. Lo único que sabemos es que el magistrado que lleva el caso ha citado a los miembros de la mesa de contratación y a los responsables de Azora, la empresa española que medió en la compra para el fondo estadounidense.

Al fin veremos si la justicia hace o puede hacer su papel… Desde aquí agradezco todo el apoyo recibido de diferentes medios de comunicación, familiares, amigos y vecinos.

Compartir es vivir...Share on FacebookShare on Google+Tweet about this on TwitterEmail this to someone